“Bajo el mentón crecido me ha el buche como a gato que bebe agua lombarda. O de cualquier otro país infame;
de la barbilla cuélgame la panza.
Si levanto la barba, el cogote siento sobre el lomo; tengo pecho de arpía y el chorreante pincel sobre mi cara hace de ella un mosaico variopinto. Todo el lomo cargo ya en la panza, que contrapesa el culo como grupa y no me deja ver ni dónde piso.”
”El cuero se me alarga por delante, se me hace nudos al echarme atrás y me estiro como un arco de Siria. Pero, falaz y extraño,
resurge el juicio que la mente porta porque mal tira cerbatana chueca. Giovanni, hoy me hallo
lejos de mi oficio y, sin ser pintor, defiendes mi honra y mi pintura muerta.”
Miguel Angel, su experiencia tras pintar la Bóveda de la Capilla Sixtina