…sobre los arcanos de la naturaleza humana, y sus formas de gobierno que son un reflejo de las masas y sus vicios.
Nerón recortó las monedas de oro para empobrecer al resto y él tener más oro para financiar sus guerras. Primera devaluación.
Cayeron los Romanos por devaluadores y luego otros imperios, hoy le toca al actual que tiró al trasto al patrón oro por el de las armas y la guerra. Hoy el imperio imprime dinero fíat(hecho a mano) y lanzarlo a las masas, sabiendo que nada vale.
Los bancos lavan dinero sucio. Países del primer mundo trafican con armas fomentando guerras en el quinto mundo. Es un buen negocio. El imperio los espía de frente.
Las farmacéuticas y la asociación americana del rifle financian senadores, presidentes… Exactamente como en países de la Unión Europea… y del quinto mundo.
Conceden el premio Nobel de Paz a quien más bombardea países extranjeros, a quien más deporta inmigrantes, y a quien más beneficia a los mercados de futuro de las compañías de seguros médicos. Claro, lo hacen con buenos modales, gestos adecuados etc. No conceden el Nobel a bocones que al menos propusieron dejar de pelear en países extranjeros y gastar tanto dinero, aunque fueren dinero fíat…
Los bancos centrales de cada paisito del primer mundillo, causando envidia a los del quinto mundo, aumentan la masa monetaria como les viene en gana, y conceden préstamos a quienes preferentemente recompran sus propias acciones, creando la ilusión de mejora económica mundial que todos creen; ciegos ante el holograma de que sus empresas se han revalorizado. Obviamente con la elegancia de Wall Street. Facebook, Google, Amazon, Tesla, IBM, Apple… es que andan de plácemes. Por seguro cuando sus acciones suben, no hay un solo cojudo que las compre, lo ha dicho quien perdió y mucho en las aerolíneas, pese a las advertencias de Windows.
El mundo está patas arriba, eso sí con elegancia y gran conocimiento. Para crear esclavos de alto vuelo están las prestigiosas universidades del primer mundo, que hoy, entregan doctorados a los tercer mundistas, eso sí, con tal que no se queden en sus países. Regresan los doctos a llenar los puestos de la burocracia… que les viene de perlas, nada de pensar, solo robar.
El poder político, los gobiernos nada tienen que ver con el dinero que usa la gente. Sean porotos que usan como intercambio, euros u oro. El esclavismo continuo.
Don Satoshi Nakamoto, libera la tecnología de transacciones encriptadas y distribuidas en millones de ordenadores, entonces, cualquier humano ayuda a verificar dichas transacciones y por ello gana unos pocos satoshis. Moneda más dura que ésta imposible. Ningún gobiernillo primer mundista puede devaluarla, interferirla falsificarla. Eso sí, pedacitos de planeta como Ecuador y Bolivia, prohíben los satoshis y su cadena de bloques distribuido, sin entender que es el camino a la soberanía y libertad, y de paso al ahorro que evita la devaluación. Claro, se entiende porque chorrean corrupción, y hasta hay un par de oligofrénicos que desean volver al Sucrecillo.
La devaluación es un vector. No sube el precio de las cosas, bienes, servicios, sino que la capacidad adquisitiva del dinero fíat está por los suelos. Comparando el poder adquisitivo del gramo de oro desde hace 10 años o más se verifica lo dicho.
¿Quieres libertad? Empieza por manejar tus claves privadas y cambiar lo poco o lo mucho que tengas a Bitcoins. Quizá mejor debas empezar a leer “El Patrón Bitcoin, de Don Ammous Saifedean.